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2011.09.19 EDUCACIÓN HÍDRICA...cultura avanzada del agua.


Glosas


... un espacio para hablar desde San Miguel

 

Por Enrique García y García*

 

EDUCACIÓN HÍDRICA … cultura avanzada del agua.

 
Así como cada año se repiten las dificultades asociadas con las temporadas de lluvias, de la misma forma aparecen eventos que permiten exponer nuevas ideas e implementos para atender los complejos problemas de abasto, distribución y saneamiento del agua; la ExpoAgua en Guanajuato Capital es una muestra. La lucha es continua en todos los frentes.
 
Cada sector de usuarios tiene sus problemas específicos y por tanto sus soluciones son distintas. No obstante todas tienen como denominador común y fin último, el uso eficiente del recurso. Las actividades de los organismos gubernamentales encargados del suministro de agua potable, agrícola e industrial se centran en que ése sea eficiente, de calidad y oportuno, sin abocarse mayormente  a las actividades de resultados a largo plazo como lo son las de planeación y educación.
 
La poca atención a la primera ha ocasionado un mal manejo de los recursos que se refleja en el agotamiento sin control de las reservas de agua subterránea, mismo que se constata permanentemente. Las concesiones para el uso del agua del subsuelo otorgan volúmenes como si los recursos fueran infinitos, lo cual no es la realidad.
 
El mecanismo de control del Estado es a todas luces ineficaz y urge que se revise y actualice periódicamente, tomando en consideración los recursos existentes, so pena de tener conflictos sociales por el creciente desabasto. En otro orden de ideas, el agua superficial, hoy por hoy la fuente constante de suministro, no ha recibido la atención que debería. Alrededor de 1950 se inició la perforación intensiva de pozos profundos que dio lugar a la destrucción de presas, bordos y cajas de agua, para convertirlos en campos de cultivo, toda vez que el uso de agua era ininterrumpido gracias a la extracción continua del subsuelo. 
 
Con relación a la segunda actividad mencionada en párrafos precedentes, la de educación, ésta se había llevado a cabo a través de actividades aisladas para atender necesidades específicas de los distintos usuarios, pero sin ningún esquema formal que las integrara. Con objeto de subsanar lo anterior, apareció el concepto de Cultura del Agua, como un medio para canalizar todas las acciones educativas. Era un buen principio.
 
Todos los organismos gubernamentales relacionados con la materia acogieron la idea y crearon dentro de sus dependencias los departamentos correspondientes. Así las cosas, empezaron a desarrollarse distintas actividades que se circunscribían a los usuarios urbanos, con una mínima atención a los agrícolas e industriales. Nacieron las campañas que fomentaban el ahorro de agua en los hogares y escuelas, mismas que ahora proliferan a través de anuncios en diversos medios de difusión y objetos promocionales alusivos. Bien, pero no basta. Hay que profundizar y ampliar la atención a todos los sectores.
 
Es mi parecer amigos míos, que el decremento del abastecimiento y deterioro de la calidad del agua hacen imprescindible un cambio de estrategia y de alcance del concepto Cultura del Agua como sinónimo de educación hídrica. La instancia ha sido rebasada. La diversidad de facetas y usuarios que tiene el uso y conservación de los recursos hídricos implica una atención específica utilizando múltiples formas.
 
A lo largo de la experiencia profesional, he tenido que recurrir a distintas formas para la transmisión de conocimientos en materia de agua, y menciono los más relevantes: cursos, conferencias, seminarios, exposiciones, tesis, libros, historietas, cuentos, boletines, videos,  talleres agrícolas e infantiles, bibliotecas y museos. Dicho conjunto de actividades ha sido un medio para educar y sensibilizar a la población sobre las diversas aristas que hay que atender en la materia. Estas experiencias que comentaré en la ExpoAgua aludida, son la base de mi perspectiva de Educación Hídrica, que conlleva a una Cultura Avanzada del Agua.

 

 

19 de septiembre del 2011

 

 

 

Cualquier comentario referente a esta columna es bien recibido en mi correo electrónico:   ptfsc@prodigy.net.mx y también en twitter @fisicogarcia

 * De familia sanmiguelense de antaño, el autor es Físico Nuclear, egresado de la UNAM, con diversas especialidades en energía, agua y transferencia  de  tecnología; autor de cinco libros de divulgación técnica y una centena de publicaciones afines; editorialista en diversos periódicos nacionales, en temas humanistas y técnicos; consultor independiente con  sede  en San Miguel de  Allende, Gto.

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