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2017.06.19 MEDIO AMBIENTE...imperial


Glosas


... un espacio para hablar desde San Miguel

 Enrique García y García*

MEDIO AMBIENTE…imperial. 

No es ninguna novedad señalar que la historia la escriben los triunfadores de las batallas y así ha sido desde tiempos remotos en todo el orbe donde nuestro País no es la excepción. Sin embargo, aún en esos casos la lectura de las narraciones y juicios de los sucesos se deben hacer tratando de situarse en el tiempo en el que ésos ocurrieron y fueron escritos, de lo contrario caemos en análisis muy parciales que desde mi perspectiva considero equivocados. 

Todo esto viene al caso porque en esta fecha se cumplen ciento cincuenta años del fusilamiento del Emperador Maximiliano de Habsburgo y sus Generales Miguel Miramón y Tomás Mejía, en el Cerro de las Campanas en la vecina ciudad de Querétaro, y por instrucciones precisas de Benito Juárez, abogado, quien apresuró el juicio plasmado en el documento “CAUSA DE FERNANDO MAXIMILIANO DE HAPSBURGO, Que se ha titulado Emperador de Mexico, Y SUS LLAMADOS GENERALES MIGUEL MIRAMON Y TOMAS MEJIA, SUS COMPLICES, por delitos contra la independencia y seguridad de la nacion, el órden y la paz pública, el derecho de gentes y las garantías individuales.”  El legajo fue emitido1 por el Ejército de Operaciones, y fechado en la ciudad de México el 24 de mayo de 1867.  

No soy autoridad alguna para revisar y menos opinar sobre el proceso arriba referido y que se guarda en la biblioteca del escribiente, pero lo que es un hecho es que sobre ella, y la obra realizada durante los tres años que duró el Segundo Imperio Mexicano ha corrido mucha tinta. Cientos de autores nacionales y extranjeros han escrito  sobre el tema; en 1970  el Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM publicó un excelente libro2 sobre la historiografía del período imperial en la que se ofrecen alrededor de doscientas referencias, por lo que no dudo que a la fecha se haya sumado media centena. Este año salió otra concisa obra3 titulada “Maximiliano Emperador de México” que aunque fue escrita hace veinte años sigue vigente por su objetividad y señala detalles del personaje poco difundidos que hace que el autor lo considere como el primer indigenista de México.  

El de la pluma ha leído una veintena de libros que tratan el tema y solamente puede opinar sobre lo referente al Medio Ambiente con base en fuentes primarias como lo son los Boletines4 de las Leyes del Imperio Mexicano”, dejando a los historiadores actuales y futuros den sus puntos de vista en lo jurídico, político, económico y social. En su oportunidad compartiré, y con la venia de los historiadores, algunos comentarios referentes al General Miramón. 

Hurgando en varios números de dichos “Boletines de las Leyes” que publicaba el Gobierno Imperial semestralmente, llama la atención la preocupación tan grande que tenía el gobernante en aspectos hidrográficos, pues además de otorgar grandes recursos económicos, asignaba las tareas a colaboradores con criterio científico para gobernar la Ciudad y el País con un horizonte a largo plazo. Abundo. 

El Boletín 185 de fecha 28 de enero de 1866 señala el impulso que se daba a las vías navegables en la Ciudad aprovechando los canales prehispánicos existentes a las que se sumaban nuevas calzadas laterales para el tránsito de carretelas y carruajes.  

En otro Boletín del mismo año daba instrucciones a su Vice Ministro de Fomento para que se completara la “Memoria para la Carta Hidrográfica de la Ciudad de México”, coordinada y revisada por el insigne ingeniero Manuel Orozco y Berra, documento al que me referí en otras Glosas5, y publicadas en Excélsior, en la que con lujo de detalle analiza el científico la orografía del Valle de México, sus ríos y lagos, y la forma en que se evitarían las recurrentes inundaciones de la metrópoli. Esos mapas nos ilustran la ciudad lacustre e identifican las zonas de riesgo actuales.  

En el número 189 instruía la atención al transporte con tranvías de mulas, en el 205 la construcción del FFCC de la Capital a Tuxpan, que se sumaba a la línea ferroviaria de la ciudad de Puebla al Océano Pacífico; en el número 215 instruye el acelerar los costosos trabajos del desagüe capitalino y en el 229 promueve la transportación marítima entre Veracruz y Nuevo Orleans.  

Algunas actividades de gobierno referentes a otras obras hidráulicas como la dotación de agua potable con acueductos y habilitación de pozos artesianos son referidas en diferentes Boletines. Desde el punto de vista urbanista cito la instrucción para la  construcción del Paseo de la Emperatriz que conectaba la residencia oficial en Chapultepec con el Palacio Nacional, su obra de vialidad citadina más importante. 

Estos son algunos hechos realizados durante dos años, mismos que fueron considerados exorbitantes e innecesarios por los críticos conservadores al Gobierno, que de facto mostraba un claro sesgo liberal. Dejo a ustedes amables lectores e historiadores adentrarse más en la obra de un emperador con visos de estadista. En materia de Medio Ambiente hay gran legado imperial. 

1 “Causa de Fernando Maximiliano de Habsburgo…” Fiscal: C. Manuel Aspiroz, Teniente Coronel, Escribano: C. Jacinto Meléndez, Soldado. Ed. Opinión Nacional, México 1868. Sin edición electrónica. Copia del original fechado en “San Luis, Noviembre 24 de 1867,- Joaquín M Escoto, secretario:”

2 “Historiografía sobre el Imperio de Maximiliano”. M. Quirarte, Instituto de Investigaciones Históricas. Históricas, UNAM, México 1970


3 “Maximiliano Emperador de México”. C. Tello D., Ed. Debate, México abril 2017


4 “Boletines de las Leyes del Imperio Mexicano”


5 “INUNDACIONES Y HUNDIMIENTOS…binomio irremediable” Glosas, E. García y G. México junio 2013




En ocasión de los cincuenta años de la muerte de Maximiliano, Miramón y Mejía.



19 de junio del 2017

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