Glosas
... un espacio para hablar desde San Miguel
Enrique García y García*
VACACIONES ECOLÓGICAS … aprender
jugando.
De nueva cuenta niños y jóvenes están de vacaciones y al
poco rato comienza el hartazgo. Mientras en las calles el tráfico mejora sustancialmente,
en casa el ambiente se deteriora. ¿Qué hacer? Los mayores pueden decidir por sí
solos mientras que los chicos hay que armarles una escuelita para que se
entretengan y en el mejor de los casos que aprendan algo de provecho. Esto
último es lo que ofrecen los cursos de verano que hoy día proliferan, no así en
mis años mozos.
La mayoría de la oferta de estas actividades proviene de
clubes deportivos y sociales, casas de la cultura y otras, que se preparan con
antelación para ofrecer actividades manuales, musicales y deportivas.
Recientemente han aparecido cursos de verano de asociaciones ambientalistas con
una temática novedosa, interesante y divertida. Excelente, compromiso social
manifiesto.
Muchas de las organizaciones públicas o privadas tienen
que cobrar para sufragar los gastos inherentes, sin embargo hay otras que
pueden absorberlos a través de partidas financieras creadas exprofeso, sean de origen gubernamental
o bien de patrocinadores con claro compromiso social. Bien por todos ellos,
pues de esta forma desaparece el impedimento económico para la mayoría de los
participantes.
Como ejemplo de una de esas instituciones que trabajan en
pro del mejoramiento ambiental está la Fundación Ecológica R, con sede en León,
Guanajuato, quienes organizan este año su curso denominado “Eco-verano
Vacaciones Verdes”, el cual ofrece una temática por demás actualizada con la
preocupación generalizada a causa del cambio climático. Es relevante el hecho
que la ciudadanía recibe información y adiestramiento en esos temas, a través
de sus grupos organizados y no tienen que esperar que las autoridades
competentes lo hagan, eso sí, a estas últimas se les pide apoyo económico y en
muchos casos lo dan. Avanzamos. Sociedad civil y gobierno, en marcha.
El curso aludido pretende promover la educación ambiental
en niños de 6 a 12 años a través de pláticas, talleres y juegos. La temática
abarca áreas como cambio climático, cuidado y conservación del suelo y agua,
por mencionar las más relevantes. Con gusto acepté la invitación para
participar en el día reservado a tratar uno de mis temas favoritos: el agua.
A través de pláticas se recalcará la importancia del valor
del agua como recurso básico y la concientización sobre su uso desmedido y
contaminación por diversos agentes, con el fin de estimular en los niños su
vigilancia y protección. Con relación a la calidad del agua, tendré la
oportunidad de impartir un Taller para medir la calidad del agua en el lago del
Parque Explora, sitio donde se impartirá el curso de verano.
La actividad del Taller inicia con la lectura del cuento
“Ya sé qué te pasa”, del programa internacional “Reto Mundial para la
Vigilancia del Agua” (World Water
Monitoring Challenge), que sirve como inducción a las tareas de medición in situ. Con el auxilio de muchos
equipos de prueba donados por el programa ya mencionado, los chicos aprenderán
a medir cuatro características para saber la calidad del agua (pH, turbidez,
temperatura y oxígeno disuelto), cuyas mediciones las enviarán a la página de
internet http://www.MonitorWater.org para
compartirlas con la comunidad internacional. El Reto es divertido, fácil,
importante y cada uno puede ayudar. Con el Reto, se miden características, se
comparten datos y se protege el agua.
Con el concurso de muchas voluntades es posible avanzar en
áreas que en otras épocas eran de la incumbencia de los gobiernos. Tal parece
que los signos de nuestros tiempos son éstos, en los que los ciudadanos nos
juntamos para resolver problemas críticos.
Es increíble cómo podemos ofrecer a los niños unas
vacaciones ecológicas en las que pueden
aprender jugando.
20 de julio del 2012
Cualquier
comentario referente a esta columna es bien recibido en mi correo
electrónico: ptfsc@prodigy.net.mx y también en twitter
@fisicogarcia
* De familia sanmiguelense de
antaño, el autor es Físico Nuclear, egresado de la UNAM, con diversas
especialidades en energía, agua y transferencia
de tecnología; autor de cinco libros
de divulgación técnica, dos más por publicarse, y una centena de publicaciones
afines; editorialista en diversos periódicos nacionales, en temas humanistas y
técnicos; consultor independiente con sede en San Miguel de Allende, Gto.
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