Glosas
... un espacio para hablar desde San Miguel
Enrique García y García*
“MARCHONS”…por México.
Nuevamente la tinta dejó de fluir por la avalancha “del
otro lado” creada por su Presidente hacia nuestro País y heme aquí comentando
otra vez sobre asuntos sociales, impulsado por la anunciada marcha nacional
convocada por algunas organizaciones ciudadanas.
Durante mi estancia estudiantil en Francia aprendí
muchas canciones infantiles francesas
que cantaba con mis pequeños hijos y que años después lo hacía en el
coche para entretenerlos durante el trayecto a la escuela; una de ellas era La
Marsellesa. No me malinterpretes amigo lector que no era malinchismo sino el
aprovechar el tiempo para aprender cantando algo de otro idioma.
Obviamente que no había traducción alguna del himno ni
menos del significado, sólo les contagiaba entusiasmo inherente a su música y
cantábamos fuerte el coro: “Aux armes
citoyens, formez vos bataillons, marchons, marchons, qu’un sang impur abreuve
nos sillons”. (“A las armas ciudadanos, formen sus batallones, marchemos,
marchemos, que una sangre impura, inunda nuestros surcos”) y ¿a qué viene todo
esto? Abundo.
La aludida marcha ha convocado a millones de personas,
en las que me incluyo, a protestar por lo que ocurre y como era de esperarse
cada quien ya lleva agua a su molino. La convocatoria fue hecha por
organizaciones ciudadanas en contra del sinnúmero de afrentas del presidente
del País vecino hacia los mexicanos, y por otro lado la pasividad y sumisión de
las respuestas de nuestro Presidente, y la mayoría de legisladores y
gobernadores del País.
En esa protesta queremos manifestar el repudio a ambas
acciones y promover una reacción ciudadana que mire hacia adentro y nos impulse
para levantar la cara digna y marchar hacia adelante porque “una sangre impura
inunda nuestros surcos”, en alusión al estribillo del himno francés.
Al escribir este texto no conozco el resultado de la
convocatoria pero me lo imagino, millones de personas, ciudadanos comunes y
corrientes, como tú y como yo, pero también políticos infiltrados que harán que
el espíritu de la marcha se desvirtúe para apoyar a quienes pretendemos cuestionar
y exigir respuestas patrióticas. No se vale, pero así es la democracia cuya
tolerancia inherente permite que esas voces resuenen y entorpezcan el espíritu
original de inconformidad y unidad de los ciudadanos, para redoblar esfuerzos
con base en nosotros mismos y nuestra Patria.
Desde mi modestísima trinchera, “Marchons, marchons,…por México.
12 de febrero del 2017
Cualquier
comentario referente a esta columna es bien recibido en mi correo
electrónico: ptfsc@prodigy.net.mx y también en twitter @fisicogarcia
* Físico Nuclear, egresado de
la UNAM, con diversas especialidades en energía, agua y transferencia de
tecnología; autor de cinco libros de divulgación técnica, dos más por
publicarse, y una centena y media de publicaciones afines; editorialista en
diversos periódicos nacionales, en temas humanistas y técnicos; consultor
independiente con sede en San Miguel de Allende, Gto.
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